En estos tiempos en los que reina la tecnología donde creo que ya son menos los que usan pinceles, o el lápiz y la goma ,pero si utilizamos mucho el Photoshop, Flash y otros muchos con su maravilloso Ctrl + Z, a mi me dio el punto de volver a coger los pinceles después de mucho tiempo (unos cuantos años), y me apetecía volver a experimentar que era eso de mancharse de pintura, equivocarse y tener que pintar encima para corregir, limpiar los pinceles, alejarte del lienzo para ver que tal se ve de lejos, que es donde realmente se ve si lo que haces está quedando como uno quiere que quede, y todas estas cosas que supone la pintura...
Y que mejor manera de que hacer todo esto en un cuadro que es para mi prima en el día de su boda (bueno en realidad se lo he dado un tiempo después) pero me ha servido para darme cuenta de la tecnología no ha conseguido hacer que pierda del todo la mano con esto del pincel, y al final estoy contento con el resultado de hacer una cosa diferente a la que suelo hacer en estos tiempos, pero que es con la que aprendí a disfrutar de esto, y lo que con los años me ha llevado a trabajar en algo que realmente me gusta, me inspira y me hace mejorar cada día.
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